EL DIQUE LA QUEBRADA MUESTRA SU MAYOR BAJANTE EN LOS ULTIMOS 5 AÑOS

El déficit hídrico, estimado en 300 milímetros, el consumo excesivo de agua de red, la habilitación de numerosas conexiones en los últimos años dan cuenta de la pronunciada bajante que experimenta hoy el Dique La Quebrada.

“Estamos en presencia de la crónica de una muerte anunciada” manifestó Marcelo Fassi, de la cooperativa de Rio Ceballos, a radio LV2 de Córdoba, al ser consultado sobre la situación que experimenta el embalse actualmente. Fassi entiende que la actual bajant

e del dique, que se ubica por debajo de los 9,46 del vertedero, “tiene una lógica. Por más que la lluvia vino a contribuir débilmente, tampoco resultó suficiente para que se revierta esta situación que se acrecienta día a día”. Si bien la provisión de agua a los habitantes de la región que se abastecen del dique está por ahora garantizada, Fassi reconoció que: “desde la Planta Potabilizadora se está trabajando por encima de la media normal. Si bien los pozos constituyen una alternativa, también se están resintiendo, porque tienen una rendición de una hora o dos y se secan, entonces hay que apagar las bombas de extracción, para que se recuperen”.

Ante tal situación y como medidas preventivas, Fassi destacó que: “la idea es que la gente a pesar de que hoy tiene el recurso, sea lo mas cuidadosa posible y podamos evitar antes de que suba el nivel del dique, tener que entrar en los temidos cortes rotativos o programados que serian una gran molestia para los usuarios del sistema”. Años anteriores tras haber atravesado situaciones similares, se gestionaron obras ante el organismo provincial correspondiente, se construyó una cisterna de almacenamiento de un millón de litros y se reactivaron pozos de agua en nuestra ciudad y Unquillo, según consiga La Voz del Interior en su edición dominical, pero las obras no fueron suficientes para acompañar al embalse con el caudal de agua necesario.

También expresa el matutino que: “la esperanza de los vecinos de la región para no sufrir la falta de agua, es la puesta en funcionamiento de la planta potabilizadora de agua de La Calera, a mediados de 2010”.