CORONAVIRUS EN RIO CEBALLOS: Dos casos de personas que no residen en la ciudad pero que registran domicilio postal. Uno de ellos, internado en el Sanatorio del Interior, fué derivado del geriátrico de Saldan///

6.6.09

A PROPOSITO DEL DIA DEL PERIODISTA

La celebración del Día del Periodista me encontró replanteándome seriamente si me interesa seguir en ello o no. Hace meses mezquinamente me llevaron a hacer silencio sin motivo aparente, aunque se encarguen de hacerme creer que los motivos eran meramente económicos. Y así ya me había pasado con el canal y antes con otra radio… No soy ese periodista de raza que corre atrás de la noticia y que vive de ella, pero creo que cuando decidí serlo, hace mucho tiempo atrás, pensaba en que la profesión presentaba otra realidad.
Lo cierto es que hoy, despunto el vicio algo cansado y desilusionado, lo admito, desde este humilde blog que no es más que aquello que critiqué durante mucho tiempo. Cortar y pegar.
Corto y pego porque siento que me cansé de someterme a los caprichos de quienes entienden que el periodismo es hablar bien de quien pone plata y despotricar en contra de los que no pagan una pauta. Me canse de quienes se sientan en el escritorio de un funcionario amedrentándolo con un papel para que el medio se encargue de hablar bien de tal o cual gestión de gobierno si la pauta publicitaria es interesante. Me cansé de quienes por envidia y enojo personal me llamaban para ocupar un espacio para no cederlo a otros con quienes los intereses personales, estaban sobre los intereses profesionales. Me cansé de que se vendiera mi programa de televisión a candidatos a intendentes a cambio de favores que obtendrían quienes manejaban los destinos del canal local, cuando funcionaba y después debieron partir de noche, porque los favores políticos nunca se pudieron pagar. Me canse del isteriqueo de quienes por ser propietarios de un medio tienen el derecho a jugar con la dignidad de quienes sólo buscan trabajar honestamente y representar las voces e intereses de quienes intenta representar.
Admito además, que me dolió un poco el desinterés de muchos de los cientos de oyentes y televidentes que cuando no estuvo más al aire mi programa de radio sólo decidieron cambiar de dial y olvidarse… Está bien, ellos escapan a la lógica que se da en los medios de nuestra ciudad, pero admito que duele cuando ayudas a llevar aunque sea un poco de buena onda a alguien que no pasa por un buen momento anímico y cuando esperas vos que te devuelvan un poco de lo que diste, se de vuelta la página.
Igual, gracias a los que se ocuparon de seguir enviando gacetillas, mails, mensajitos de texto y que nos paraban en la calle para invitarnos a tal o cual evento.
He recibido muchos saludos por el día del periodista y los agradezco sintiendo que al menos mi trabajo humilde, llenos de imperfecciones y lejos de querer ser el único poseedor de la verdad me a ayudado a encontrar un lugar en esta sociedad de Rio Ceballos y en ciudades vecinas. Gracias.