Finalizó la 3º edición de la Feria del Libro y el 17º Encuentro Nacional de Teatro, con dispar presencia de público.
Mientras la Feria del Libro, organizado por la Biblioteca Popular Aragón King, va constituyéndose en un clásico de la cultura en nuestra ciudad, el Encuentro de Teatro acusa la ausencia de uno de sus mentores, el desaparecido Rodolfo Sarmiento. Es sabido que no se trata de las típicas obras teatrales comerciales, donde el despliegue de luces, lentejuelas y pulposas vedettes encabezan las marquesinas de las salas de la ciudad, sino de un prestigioso encuentro que capta la atención de numerosos elencos de teatro independiente del país. Pero este año algo pasó para que se sintiera casi desapercibida la realización del evento.
Además algunos organizadores del encuentro dejaron entrever cierto malestar con el municipio por lo que entienden el escaso apoyo que se le brindó al evento. A tal punto que, siempre según los dichos de organizadores, a último momento se negociaba la utilización de la Sala Caminito Serrano.
Escasa difusión, donde no sólo con la publicación de afiches y de información en facebook alcanza para dar a conocer la grilla de las presentaciones teatrales y una aparente ruptura con el área de turismo del municipio para brindar mayores detalles del evento. Para agregar, la ausencia de funcionarios municipales en la apertura y cierre del encuentro.
Los organizadores de la Feria del Libro, también mostraron cierto descontento con referentes del área de Cultura del municipio. Aparentemente el programa cultural de la gestión alcanza a exposiciones en la Capilla Histórica, concurso de preguntas y respuestas para colegios secundarios en el día de los estudiantes y el ciclo “Domingos musicales” que se realiza entre enero y febrero de cada año. Sin mencionar los Carnavales Venecianos, que poca atención captan entre los vecinos de la ciudad. El aporte económico por parte del municipio es escaso, entienden los organizadores y el esfuerzo por parte de los mismos, debe ser mayor. Acaso cabe preguntarse si el presupuesto para Cultura, alcanza para acompañar otros eventos no oficiales?.
Nadie obliga a que el municipio deba hacerse cargo de cuanto evento privado se organice, pero a esta altura y rescatando una frase de charla de café con el Intendente Lemos, “traer eventos, no es hacer una política de turismo” a simple vista se nota que casi nada de lo que sea organizado por fuera de la gestión municipal, subsista o pueda proyectarse en el tiempo. Sin hablar de aquellos eventos organizados por gestiones anteriores, que hoy son sólo recuerdos.
Lejos de significar un gasto de dinero para el municipio, el apoyo no sólo económico a estos eventos, significa seguir construyendo la identidad de la ciudad y apoyando las acciones de privados que enriquecen a la comunidad. Significa más que restarle dinero al gobierno municipal, sumar.
Mientras la Feria del Libro, organizado por la Biblioteca Popular Aragón King, va constituyéndose en un clásico de la cultura en nuestra ciudad, el Encuentro de Teatro acusa la ausencia de uno de sus mentores, el desaparecido Rodolfo Sarmiento. Es sabido que no se trata de las típicas obras teatrales comerciales, donde el despliegue de luces, lentejuelas y pulposas vedettes encabezan las marquesinas de las salas de la ciudad, sino de un prestigioso encuentro que capta la atención de numerosos elencos de teatro independiente del país. Pero este año algo pasó para que se sintiera casi desapercibida la realización del evento.
Además algunos organizadores del encuentro dejaron entrever cierto malestar con el municipio por lo que entienden el escaso apoyo que se le brindó al evento. A tal punto que, siempre según los dichos de organizadores, a último momento se negociaba la utilización de la Sala Caminito Serrano.
Escasa difusión, donde no sólo con la publicación de afiches y de información en facebook alcanza para dar a conocer la grilla de las presentaciones teatrales y una aparente ruptura con el área de turismo del municipio para brindar mayores detalles del evento. Para agregar, la ausencia de funcionarios municipales en la apertura y cierre del encuentro.
Los organizadores de la Feria del Libro, también mostraron cierto descontento con referentes del área de Cultura del municipio. Aparentemente el programa cultural de la gestión alcanza a exposiciones en la Capilla Histórica, concurso de preguntas y respuestas para colegios secundarios en el día de los estudiantes y el ciclo “Domingos musicales” que se realiza entre enero y febrero de cada año. Sin mencionar los Carnavales Venecianos, que poca atención captan entre los vecinos de la ciudad. El aporte económico por parte del municipio es escaso, entienden los organizadores y el esfuerzo por parte de los mismos, debe ser mayor. Acaso cabe preguntarse si el presupuesto para Cultura, alcanza para acompañar otros eventos no oficiales?.
Nadie obliga a que el municipio deba hacerse cargo de cuanto evento privado se organice, pero a esta altura y rescatando una frase de charla de café con el Intendente Lemos, “traer eventos, no es hacer una política de turismo” a simple vista se nota que casi nada de lo que sea organizado por fuera de la gestión municipal, subsista o pueda proyectarse en el tiempo. Sin hablar de aquellos eventos organizados por gestiones anteriores, que hoy son sólo recuerdos.
Lejos de significar un gasto de dinero para el municipio, el apoyo no sólo económico a estos eventos, significa seguir construyendo la identidad de la ciudad y apoyando las acciones de privados que enriquecen a la comunidad. Significa más que restarle dinero al gobierno municipal, sumar.
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