SALSIPUEDES LANZA PROGRAMA DE ALFABETIZACION

La Municipalidad de Salsipuedes y la organización mundial “Un Mundo Mejor es Posible” firmarán este jueves, 10 de diciembre, el convenio que permitirá la aplicación del Programa de Alfabetización Cubano “Yo si Puedo” el próximo año en la localidad. La rúbrica y lanzamiento se llevarán a cabo este jueves a las 11 horas, en el Salón Cultural “Oscar Salaverry”, ubicado en la Estación Terminal de Ómnibus y contará con la presencia del Intendente, Sergio Cornejo, miembros del Departamento Ejecutivo, representantes del Programa cubano y público interesado. Abrir las puertas del conocimiento, explorar la geografía del mundo y recorrer el país de la fantasía a través de la comprensión de textos, son algunos de los objetivos del programa educativo “Yo si puedo” destinado a adolescentes y adultos analfabetos o funcionales, no escolarizados.Elaborado por un grupo de profesionales cubanos del Instituto Pedagógico Latinoamericano y del Caribe (IPLAC), y organizado por la organización mundial “Un Mundo Mejor es Posible” (UMMEP), el programa se puso en funcionamiento hace más de un año en El Bolsón, donde arrojó alentadores resultados.El curso– que es gratuito y que tiene una duración de tres meses– está basado en una innovadora práctica pedagógica que combina la asociación de letras y números, la proyección de videos y el sentimiento de autoestima. En la actualidad, se esta desarrollando en once provincias argentinas y consiguió más de 3.500 egresados.
La metodología.

"Yo, sí puedo" es un programa cubano de alfabetización que fue premiado por la Unesco y que ya se aplicó en distintos países de Africa, el Caribe y América latina."Yo, sí puedo", basa su estrategia en el conocimiento empírico de los números, que tienen las personas a partir de la vida cotidiana.Así, cada vocal se asocia a un número y se aprende a leer y escribir a partir de una cartilla impresa en la que también se realizan ejercicios a partir de consignas dadas.El programa también incluye un soporte audiovisual en el que se utiliza un televisor y una video. También incorpora el rol de facilitadores, se trata de personas de la comunidad, no necesariamente docentes, que acompañan el proceso de aprendizaje de quienes desean alfabetizarse. Las 65 videoclases, distribuidas en 17 casetes, son dictadas por una docente que desarrolla los contenidos a partir de los elementos propios de la cultura de cada lugar.Según explicó, Alcira Vaca, representante del Programa en Córdoba, en cada comunidad, el sistema se pone en marcha con un relevamiento para detectar a las personas que no están alfabetizadas. A partir de ese momento se organizan los grupos que pueden funcionar en cualquier espacio físico.